UN COMEDOR EN BLANCO

¡Qué pasada!
Esas han sido las palabras de mi amiga al ver el nuevo look de la pareja de sillas que teníamos en La Trastienda. Ya le dije que el cambio sería espectacular, pero al verlas ha quedado impresionada.
No es para menos, ya que si véis cómo eran antes no tienen nada que ver con su aspecto actual.


Se han elegido para dar un contrapunto a una cocina actual, se combinan las líneas rectas de la mesa con el sabor antiguo de éstas sillas. Quedan integradas en el ambiente perfectamente, ya que están pintadas en blanco y decapadas.





 

En esta ocasión se han elegido para el office pero podrían quedar bonitas en cualquier rincón.